Estoy acostumbrado a ambientar musicalmente momentos como el de ayer pero no os voy a negar que fue una sensación un tanto extraña no solo por las medidas de seguridad habituales, sino por el recuerdo y la experiencia que durante varios años he tenido actuando en ese mismo espacio frente a centenares, diría que unos pocos miles de personas, de pie, botando, gritando, bailando, de noche, de madrugada y con una energía y un calor que me llegaba directamente hasta el mismo escenario.
Ayer la energía y el calor lo recibí de una manera completamente diferente pero igual de especial y efectiva. Fue maravilloso levantar la mirada y encontrar las mesas llenas de amigxs y muchos rostros y caras conocidas. Hubo gente que por el motivo que fuera estaba allí y cuando cruzábamos miradas me regalaban sonrisas y apoyo en forma de gestos desde sus sillas. De verdad que es precioso y es un apoyo muy importante estar ahí arriba y recibir todo ese cariño y buena energía.
Sin olvidarme de todxs lxs que no estuvisteis pero siempre estáis, lxs que me mandasteis muestras de cariño, apoyo y ánimo en forma de llamada o mensaje. Gracias a lxs que lo hicisteis posible y también a los medios de comunicación y prensa que se hicieron eco del evento y me dieron voz y espacio en su programación. A todxs vosotrxs; eternamente agradecido.
Fue una sesión muy ecléctica donde además de poder presentar diferentes singles y remixes pude viajar y tocar diferentes estilos que tanto me gustan como es el soul, jazz, acid jazz, funk, chill out, RnB, Hip-Hop, pop, deep house, house, etc... en un lugar idílico como es la plaza de las enfermeras (terrazas del Kursaal) en un entorno con unas vistas al mar privilegiadas de nuestra querida Donostia.
La verdad que hay muchos, por no decir la gran mayoría, de profesionales del ocio y la cultura tanto diurna como nocturna que lo están haciendo increíblemente bien y es una pena que ‘paguen justos por pecadores’ y se haya dado un paso hacia atrás y un endurecimiento de las restricciones.
Ayer, una vez más, al igual que durante el Jazzaldia, en ese mismo enclave, las medidas, las distancias de seguridad, el personal, el staff, el escenario, los asistentes, equipo técnico, la ubicación y un largo etcétera se cumplieron y se realizaron de manera extraordinaria y ejemplar. Felicitar y agradecer tanto a la organización como a los asistentes.